Samborondón tiene el objetivo de convertirse en una ciudad sostenible, con pilares enfocados en lo social, económico y principalmente en el cuidado del medio ambiente. Así, se encamina a reducir la huella de carbono y mitigar los efectos del cambio climático.
Desde la primera administración del alcalde Juan José Yúnez, se ha trabajado en ordenanzas ambientales, tales como:
- Tasa de gestión integral de desechos.
- Régimen especial e incentivos para construcciones de conceptos de edificios sostenibles.
- Regulación de medios de transporte sostenibles (electrolineras).
- Distrito Industrial y de Negocios para atraer industrias de mediano y bajo impacto.
De igual manera, se han implementado programas municipales como Siembra Samborondón y Samborondón en Bici; que se suman al Plan de Sostenibilidad de Samborondón, elaborado con asesoría de Sambito y el Centro de Economía Circular.
En este camino, construimos la primera planta clasificadora de desechos del país junto a Geocycle; con lo cual se reutilizará hasta un 50% del material clasificado de los desechos de la ciudad.
Además, a través del Plan de Repotenciación de Plantas de Agua Potable de Samborondón, se ha asegurado agua potable de calidad a la ciudad Samborondón, Boca de Caña, Tarifa y recintos.
La Alcaldía también ejecuta un proceso de crédito con la CAF (Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe) para la construcción de la primera planta de tratamiento de agua en el sector La Puntilla.
Se han ejecutado soluciones viales como nuevas vías: av. Alfarero, vía la Barranca, vía Parque Bicentenario. Así también, se proyecta la intervención integral de la av. Samborondón y un intercambiador de tránsito a la entrada del sector Ciudad Celeste.
La implementación de más pasos elevados para peatones y semáforos inteligentes con paneles solares son acciones que se mantendrán en la ciudad.
Samborondón también fue escogido para el proyecto ‘Generation Restoration’ de las Naciones Unidas, como una de las ocho ciudades piloto del mundo que recibirán fondos no reembolsables del Programa del Medio Ambiente de las Naciones Unidas (UNEP).
Con este financiamiento se restaurarán manglares a lo largo de los ríos Daule y Babahoyo, se introducirá especies locales y se implementarán técnicas de gestión sostenibles.
Así, se generarán políticas públicas para la restauración sistemática de ecosistemas urbanos, con énfasis en manglares.